Mediante la observación y el estudio de los cambios que ocurren de manera natural en el ciclo reproductivo de la mujer, se pueden determinar los días fértiles y el día de la ovulación, y por tanto, la mayor o menor probabilidad de tener un embarazo.
Esta metodología se basa en el estudio del método Billings, que ha sido enriquecido con nuestras investigaciones y el amplio conocimiento que tenemos sobre la fertilidad femenina, así como de los trastornos y diferentes circunstancias que afectan a la misma